- Carol Antonio Altamirano, el chapulín… morado
- Sofía Castro, sólo ambiciones y dolores de cabeza.
- Hernández Fraguas, si no hay problemas él los crea.
Tomás Ezequiel Toledo
Carol Antonio Altamirano es el cliente preferido de los artistas de la confección de prendas de color.
En sus pininos en el Partido Revolucionario Institucional portó los colores verde, blanco y rojo, con el escudo de ese instituto político; después coqueteó con el Partido de la Revolución Democrática, que lo hizo diputado federal; hace tres años, en la elección intermedia en el estado, la alianza le permitió ser postulado por el Partido Acción Nacional.
Y bueno, dado que ya es una práctica recurrente en él, ahora vestirá el color morado del partido Movimiento de Regeneración Nacional. Sus devaneos políticos derivaron en el hecho de que Carol apareciera en dos listas diferentes, en la del PRD y en la de Morena como candidato a diputado federal por el distrito V de Salina Cruz.
Ha sido muy hábil en ejercer la práctica del chapulineo, pero la culpa no la tiene sólo él, que ha hecho su luchita, sino los partidos que lo han adoptado sucesivamente en dos décadas. Tal ha sido su comportamiento que incluso se ha hecho el indispensable en ciertas áreas, por ejemplo cuando fue diputado en la 62 Legislatura.
Es prudente recordar que se presentó, y logró convencer a los demás, de que era la mano de Gabino Cué en la Cámara de Diputados federal, y fue secretario de la Comisión de Presupuesto e integrante de la de Hacienda.
Desde ahí, por ejemplo, hizo estallar la crítica a la Secretaría de Hacienda respecto del recorte que se quería implementar en el primer año de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto a los estados, mediante una maniobra -dijo entonces- de Luis Videgaray.
Con tal fortuna para su causa y la de Gabino, que le urgían los recursos para robárselos, que Hacienda reculó y repuso los fondos que se quitarían a los estados.
EDIL DE IXTALTEPEC
Como se sabe, bajo las siglas del sol azteca, Carol fue alcalde de su natal Ixtaltepec, coordinador de los diputados de la 61 legislatura estatal, dirigente estatal del partido y también uno de los defensores visibles de Gabino Cué en la elección de 2010 y representante del PRD en la elección, una época en la que Andrés Manuel López Obrador apostó por Gabino y lo impulsó, con sus recurrentes giras, para ganar la gubernatura ese año.
En la elección de gobernador pasada respaldó a José Antonio Estefan Garfias, quien perdió y continuó como diputado federal. Otro personaje que también flirteó con Morena, como él mismo lo hizo público. Si bien Morena es uno de los partidos que más cascajo recibe, todo parece indicar que no quiso a Estefan Garfias, uno de los señalados del desvío millonario en dólares a cuentas de bancos en Texas.
Porque sí, hay desechos de otros partidos que van a caer a Morena. Pero también hay de cascajos a cascajos.
Con la chaqueta panista-perredista, Carol sorteó dos años más como diputado local en la 63 legislatura a la que, el jueves, por fin entregó su oficio de separación de la bancada perredista y de la coordinación del grupo, que se hará oficial en la sesión del martes.
Ahora vestirá una camiseta morada y oh, ironías, su oponente será nada menos que el junior de Estefan, quien es el coordinador de la campaña presidencial por el PVEM. Claro, si Carol ha vestido muchas camisetas, por qué la familia Estefan no.
Chapulín o, simplemente, resultó un verdadero hacedor de chaquetas para cambiar según el oportunismo o el momento.
SOFÍA CASTRO
Por el PRI, Sofía Castro es otra política que aparece en las listas para diputada federal de mayoría. Como secretaria de Asuntos Indígenas del gobierno poco resolvió con los programas que tuvo a su cargo y cuando se le preguntaba por la poca eficacia de su trabajo, respondía que desde el Palacio de Gobierno la bloquearon.
Siempre se quejó de que no tenía recursos y que ella pagaba de su bolsa para necesidades básicas, como la gasolina y el chofer que la llevaba, en su camioneta -eso decía-, a las comunidades indígenas.
Sofía es un personaje que ha causado más dolores de cabeza que las soluciones que ofrece. Se enfocó, por ejemplo, en conseguir recursos para el “rescate” de Mitla, pero la zona arqueológica sigue igual. Dicen en la Ciudad de México que se le veía constantemente en la Cámara de Diputados para sacar dinero destinado al libramiento, pero la realidad es que buscaba, como en la planta desecadora de mangos, un pellizco del presupuesto para ella.
En días recientes ha circulado un libelo que, aunque por su naturaleza se trata de un documento para desprestigiar, mucho tiene de verdad y ventila las ambiciones de Sofía y las de su hermano José, combinadas con las tropelías de ambos.
SKATERS
El viernes, jóvenes dedicados al patinaje ofrecieron una conferencia de prensa para quejarse de la persecución de que son objeto por parte de José Antonio Hernández Fraguas.
Este alcalde, que en lugar de solucionar problemas para la ciudad, los crea y los aviva, presionó para que el cabildo aprobara la prohibición del patinaje en los parques públicos, como El Llano, el Jardín Conzatti y la plazuela de El Carmen Alto y además les echó a la policía municipal.
Los confinó al Skate Park Las Águilas, un espacio en las inmediaciones de la agencia Candiani que, dicen los patinadores, está descuidado y se encuentra en una zona de especial inseguridad, porque además en esa área adultos practican otras actividades.
Los skaters son chavos de entre 8 y 12 años, que requieren un espacio adecuado y ellos consideran que los jardines citados son ideales, mientras que la alcaldía defiende que causan daño a las áreas comunes.
El jueves entregaron un escrito. Dicen: “Quisimos hacer uso de nuestro derecho de audiencia; sin embargo, con gran trabajo logramos que nuestro oficio fuera sellado y recibido, y en él no pedimos otra cosa que evitar que nos criminalicen por nuestra vestimenta o por el tipo de deporte que practicamos, el skateboard, que además ya es un deporte olímpico que hará su debut en las Olimpiadas de Tokio 2020”.
Los chicos defienden que, por ejemplo, de quienes han practicado en El Llano, han surgido excelentes skaters y no quieren convertirse en un problema público.
No lo son. El problema es Hernández Fraguas, que quiere cerrarles espacio de recreo a los jóvenes, de por sí presionados por la falta de oportunidades escolares y económicas. ¿A qué espera Hernández Fraguas para ayudarles, defenderlos e incluso alentarlos? Son los jóvenes de la ciudad.