Niños, esclavos del trabajo


Largas filas para tomar autobús que los llevará a su centro de trabajo
  • La época actual revela la dependencia de los jóvenes en su empleo.
  • Estrés laboral, causa principal de enfermedades en grandes ciudades.
  • Obreros pierden horas para trasladarse a su lejano centro de trabajo.
  • Laboran bajo presión, con bajos salarios y exiguas prestaciones.
  • En mes de la patria, dos grandes escritores se refieren a Benito Juárez.
  • “México se salvó por un principio y por un hombre”, dijo Víctor Hugo.

Reportajes Metropolitanos

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Por ello la felicidad, claro que tiene muchos costos.

Desde muy pequeños sufren. Veamos.

Comienzan las clases y al niño en llanto le dice el profesor:

– Qué te pasa pequeño.

– Se me perdió el compás y mi mamá me va a matar.

– Tranquilo no es para tanto, no estés tan preocupado, agrega el maestro.

– Cómo no voy a estar preocupado. Mi hermana perdió la regla y la echaron de casa.

Nos quieren vender la idea que la inteligencia artificial será una maravilla.

Y tal parece que lo consiguen con las máquinas inteligentes, que vendrán a remplazarnos

Nos olvidamos que somos el mamífero que evolucionó dentro de la especie. Somos racionales y espirituales.

Nos emocionarnos con el amor, la empatía, la capacidad de tomar decisiones y llorar ante las pérdidas.

Inundaciones en San Gabriel Jalisco

Desde la revolución industrial hasta el presente, el de la era digital, en México, se vuelven esclavos del trabajo.

Gastan más de lo que ganan, el salario no es suficiente para pagar las modernidades, hasta cinco años para pagar un carro y treinta para ser propietarios de una casa.

Por el incremento del trabajo productivo se agotan los recursos no renovables de la naturaleza.

Lo vimos hace unos días en el pueblo de San Gabriel Jalisco, el desbordamiento del río que inundó al pueblo por la irresponsabilidad de los que han comprado las tierras para sembrar aguacate, el oro verde en nuestro país.

La felicidad tiene muchos costos sostiene la doctora y escritora Rosa Chávez Cárdenas.

Añade que el materialismo domina a la espiritualidad, de manera que se trabaja arduamente para cubrir las necesidades de la cultura consumista en la que estamos inmersos.

El estrés laboral es la causa principal de enfermedades, en las grandes ciudades los obreros pierden horas para trasladarse al lugar de trabajo, laboran bajo presión, regularmente con bajos salarios.

De acuerdo con el Inegi de los 15 millones 500 mil jóvenes que tienen empleo en México, 80 por ciento no perciben el salario suficiente para mantener a una familia y el 50 por ciento carece de seguridad social.

Las condiciones de trabajo para los jóvenes se ubican entre las peores de OCDE. En cuanto a los hispanos que trabajan en Estados Unidos, también son explotados por no contar con residencia.

San Gabriel bajo las aguas

En cuanto al perfil de los que trabajan, un sector se conforma con tener un salario, prestaciones y antigüedad para una pensión.

En el otro grupo predomina el trabajo como búsqueda de eficacia, deseo de crecimiento económico y necesidad de reconocimiento.

Los empresarios, no se conforman con un salario, corren el riesgo para cumplir sus objetivos y su sueño, cuentan con varias aptitudes: deseo de superación, don de liderazgo, esfuerzo y motivación para sortear los obstáculos.

El emprendedor, no necesita estudios universitarios, aprenden en la práctica, se rodean de un buen equipo de especialistas en diferentes áreas.

Las historias de los grandes empresarios es una lucha de esfuerzo y deseos de superación, emprenden con una idea de negocio revolucionaria, innovadora, cuentan con ADN especial: ambición, perseverancia, sentido común y humildad para reconocer las fallas, no todo es perfecto.

El narcisista, el que se siente perfecto, no revisa sus errores, pierde el negocio o no crece.

Para que una empresa se vuelva líder se necesita, una idea innovadora.

Un ejemplo es Mark Zuckerberg, un buen programador que tomó la idea de sus compañeros en Harvard, al ver el negocio, se apropió de la idea, hoy se considera el creador y fundador de Facebook, y es uno de los hombres más ricos del mundo.

No podemos negar que el consumismo se volvió una dictadura y todos de una u otra manera estamos atrapados en sus redes: ya no se trabaja para vivir, sino para comprar.

El trabajo ya no se relaciona con la naturaleza, la granjita sustentable de las otras generaciones. La mayoría trabaja como esclavo, mentalmente, conectada y sometida a la lógica de las máquinas y las computadoras.

Estrés, mal de nuestro tiempo

Para tener, dicen los que laboran en territorio norteamericano, todo lo compran a crédito.

En el disfrute de la vida, vale la pena reflexionar, dividir el tiempo: para dormir, aprovechar el tiempo libre y el placer de la intimidad con la pareja. Tomemos consciencia, podemos disfrutar los alimentos, construir el mundo a partir de lazos afectivos y responsabilizarnos por los problemas que aquejan a nuestro país y al mundo.

PARA APRENDER EN SERIO

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Al hombre manco que se ponía el reloj de cuerda en el muñón, le pregunta su amigo. Por qué no te lo pones en el brazo completo.

Tienes razón. Pero quién le dará cuerda.

Un consejo, último deseo y una explicación.

En el vino hay sabiduría, En la cerveza hay libertad, En el agua hay bacterias

A los amigos que disfrutan de un vaso de vino o algo que se le parezca… y a los que no lo hacen y son siempre vistos con una botella de agua en sus manos, recomienda San Compadre, OG:

En un número de ensayos cuidadosamente controlados, los científicos han demostrado, que, si tomamos un litro de agua cada día, al cabo de un año habremos absorbido más de un kilo de Escherichia coli (E. Coli), bacteria encontrada en las heces…

En otras palabras, estaremos consumiendo 1 kilo de “popó” para no decir caca.

Sin embargo, no corremos ese riesgo cuando tomamos vino, cerveza o aún mejor, tequila, ron o whisky, ya que el alcohol tiene que pasar por procesos de purificación, ebullición, filtrado y/o fermentación.

Por lo tanto, es mejor tomar vino y hablar pendejadas (perdón, hic), que tomar agua y comer caca.

No es necesario agradecer esta valiosa información: ¡Es un servicio social!

Empecemos a la una, con una.

Y ya animados, una de periodistas.

Un hombre muy enfermo está acostado en la cama.

Se da cuenta de que no le queda mucho tiempo, por lo que le pide a su enfermera que le traiga a su esposa, hijos, así como testigos y una cámara para grabar sus últimos deseos.

Cuando todos están reunidos, sus ojos nublados y sus rostros dibujados, él comienza a hablar.

«Hijos, quiero que se repartan las casas de Paseo de la Reforma». «Los apartamentos de Santa Fe». “Las oficinas en el Centro de la ciudad”

Para «mi querida esposa, los edificios residenciales en la bahía de Santa Bárbara, Anzures”.

La enfermera y los testigos quedan impresionados, por las extensas posesiones, y cuando el hombre muere, la enfermera afirma a la familia:

Su esposo debe haber sido un hombre muy trabajador para haber acumulado todas estas propiedades.

La esposa solo gruñe.

«No, solo se dedicaba a repartir periódicos casa por casa».

Mark Zuckerberg

Y algo también que ilustra

The New York Times nos explica que la selva tropical más grande del mundo, que esta semana ha ocupado las portadas de los diarios de todo el planeta por los incendios forestales que la consumen hace casi veinte días, es la Amazonía o Amazonia (la primera es más común en Perú, Ecuador y Venezuela), pero no el Amazonas.

La región amazónica abarca zonas de Brasil, Perú, Bolivia, Colombia, Venezuela y Ecuador, y el fuego de estos días ya ha llegado a áreas de Bolivia y Paraguay.

Amazonas, como muchos llaman a esta selva erróneamente, es en realidad el nombre de uno de los estados que conforman la República Federativa de Brasil, así como del río que tiene una extensión de 6400 kilómetros y uno de los más largos del mundo.

Por eso es más preciso decir que hay incendios en la Amazonia o Amazonía, y no que hay incendios en el Amazonas, pues si bien el estado de Amazonas es uno de los sitios que están en llamas, también hay fuego en los estados brasileños de Pará y Rondônia.

En lugar de rezar por el Amazonas, nuestras oraciones tendrían que extenderse a toda la región.

Y también a los abstemios, a los viejos y a los periodistas que aún no son ricos.

DE DOS ESCRITORES

Carlos Ravelo Galindo, afirma:

Tiene toda la razón Porfirio Muñoz Ledo: “Qué manera de legislar”. Pero antes un recordatorio maternal.

¿A todos?, preguntamos.

En el mes de la Patria. Sí, de dos amigos escritores que hablan de Benito Juárez y su familia.

Ella, doña Rusia, hija del poeta y dramaturgo Carlos MacGregor, y don José Antonio Aspiros Villagómez. Colega historiador.

Ambos nos enteran de un dialogo. Que nosotros aprovechamos por ser historia, civismo, cultura. Y buena prosa.

Ellos trabajaron en prensa del Seguro Social. Así lo recuerda el historiador:

“Es una coincidencia que tanto ella como el tecleador, hayan trabajado en épocas diferentes (lo mismo que otros colegas y amigos como Nancy Elena Baray, Alexis Olmos, Carlos Ravelo Galindo, Mauro Jiménez Mora y Arturo González) en el Departamento de Prensa y Difusión del Instituto Mexicano del Seguro Social.

En cuyo teatro ‘Tepeyac’ se representó Huey-Colhuacán, una obra en verso de su padre, el poeta y dramaturgo Carlos Mc Gregor Giacinti

(Nos aclara que la función inició tarde, porque fue el 2 de octubre de 1968 y a uno de los actores lo complicó la matanza en Tlatelolco y llegó demorado al escenario).

La periodista y locutora Rusia Mc Gregor González recuerda con especial afecto uno de los diversos trabajos que forman parte de su trayectoria: su paso por el programa radiofónico La Hora Nacional entre 1966 y 1979, cuando lo grababan los viernes en los estudios de la XEW, “pero si algo pasaba entre el viernes y el domingo antes de la transmisión, nos llamaban a editar la grabación para añadir, en ocasiones, «a los postres, dijo:» y zas, ponían el discurso del señor presidente en alguna comida”.

También se acuerda que para ese programa -del cual niega que hubiera unificado a los mexicanos porque supuestamente todos apagaban su radio cuando se iba a trasmitir- ella entrevistó a muchos personajes como el entonces primerizo cantautor Juan Gabriel, al dramaturgo y cronista Salvador Novo y a los poetas Carlos Pellicer y José Gorostiza, este último en 1973 cuando ya se encontraba muy enfermo y no daba entrevistas.

Margarita Maza de Juárez

Para poder hablar con Gorostiza, llegó a su casa con un ramo de flores blancas y dijo que iban -ella y un operador- con un saludo cordial de quienes hacían La Hora Nacional.

“Muy atentos todos”, la dejaron pasar micrófono en mano y así pudo grabarle algunas palabas que usó como parte de un programa sobre el también diplomático y académico de la lengua, autor de Muerte sin fin.

Son evocaciones que afloraron con motivo del plan que hicimos para que Rusia Mc Gregor transcribiera y nos compartiera el texto de un disco LP, que contiene seis cartas enviadas o recibidas por Benito Juárez entre 1864 y 1867, dos de ellas mandadas desde Chihuahua a su “querido hijo Santa” (su yerno Pedro Santacilia).

En la segunda de esas comunicaciones, fechada el 18 de mayo de 1865, Juárez se refiere a las pretensiones del general Jesús González Ortega de desplazarlo de la Presidencia de México. “Después que se le contestó que aún no era llegado el día en que se encargara de la Presidencia, pidió que se le permitiera ir a uno de los puntos del interior donde se combatía contra la intervención para prestar sus servicios”, dice la carta de don Benito quien, dos años más tarde, “mandó hacer prisionero sin causa ni juicio” -preso político- a ese héroe de la Reforma, según narra el doctor en Historia Silvestre Villegas Revueltas en el número 35 de Relatos e Historias en México, de julio de 2011.

También conforme a la misiva enviada por Juárez al yerno, González Ortega habría brindado en una ocasión “porque pronto desapareciese del mando Benito Juárez, que tantos males había causado a la República”.

Don Benito -señala por su parte Villegas- emitió a finales de 1865 un decreto para prolongar su mandato al término de su periodo constitucional (“golpe de Estado”, lo llamaron varios liberales) y otro edicto para destituir de sus cargos a González Ortega, su virtual sucesor ante la imposibilidad de celebrar elecciones debido a la guerra.

En 1972 y con motivo del centenario luctuoso de Benito Juárez, por cortesía de Cigarros El Águila, S.A. fue grabado por Discos CBS el “long play” titulado Cartas de Juárez.

Un legado de la historia, en las voces de Jaime Ortiz Pino y Rusia Mc Gregor González, con algunas piezas sinfónicas, entre ellas la Novena de Beethoven, como música de fondo.

Dos cartas enviadas al presidente en esos años, complementan la grabación.

En una de ellas, el escritor francés Víctor Hugo se expresa en términos literarios de cómo “México se salvó por un principio y por un hombre”. “El principio es la República, el hombre sois vos (Juárez)”. Fue escrita el 20 de julio de 1867, un mes y un día después del fusilamiento de Maximiliano en Querétaro.

“El destino de todos los atentados monárquicos conduce al fracaso. Todos los usurpadores empiezan por Puebla y terminan por Querétaro”, le dice al gobernante mexicano el autor de célebres novelas como Los miserables y Nuestra Señora de París.

La única carta conmemorativo escrita por una mujer, y por tanto grabada por Rusia Mc Gregor, fue la enviada a Juárez por su esposa Margarita Maza Parada desde Nueva York el 21 de diciembre de 1866, cuando ya se aprestaba a regresar a México pero necesitaba saber si vía Monterrey o Veracruz, según fueran los planes de su “estimado viejo”, como le llama en la misiva.

“Las únicas ventajas que resultarían de irme por Veracruz, son que yo misma me llevaré a nuestros hijitos, mientras que si me voy por Matamoros no será así”.

Se refería a sus hijos José María y Antonio, muertos en Nueva York, para cuyo sepulcro iba a comprar unos adornos.

“Y si me voy por Monterrey -le explicaba-, dejo aquí encargada a alguna persona que tanto los cadáveres como los adornos, me los mande por Veracruz cuando nosotros los pidamos”.

“Te mando unas pantuflas y un cartapacio”, son las últimas palabras que destacaron en la carta de Margarita a Benito en la voz de Rusia Mc Gregor, cuyo empeño en transcribir las seis misivas para compartírnoslas, se le reconoce y agradece desde aquí.

craveloygalindo.@gmail.com