Jesús Sánchez
Los tarjetazos de Melita Peláez
1.- Claudia Ruiz Massieu demostró que en eso del molcajete ningún suspirante presidencial le gana.
Pepe Calzada Rovirosa, el ex góber de Querétaro y secretario de Agricultura que también hace fila entre los suspirantes de 2018, se reveló como un emprendedor nato en temas de política gastronómica y por eso convenció a los secretarios de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu; de Salud, José Narro y de Turismo, Enrique de la Madrid, a participar en el #RetoGuacamole Y sí, en un intermedio de la Expo #MxAlimentaria 2016, los competidores demostraron de qué están hechos.
Disciplinado, Pepe Calzada le hizo caso a @EPN y no se agandalló con el premio que le tocó a la canciller, mientras que a los demás no se supo si se pasaron de ajo o les quedó desabrido. Parece que para Narro y De la Madrid eso no es lo suyo.
Pero como son los tiempos de la quinceañera Rubí todo se vale. Y parece que fue literal para el preciso @EPN quien estuvo muy ocurrente en la inauguración de Expo Agroalimentaria y pidió que ante los tiempos actuales hay que echarle muchos huevos.
@EPN reveló estas cifras: México exporta 400 litros de tequila por minuto; nuestro país es el principal exportador de cerveza; 7 de cada 10 aguacates son mexicanos.
Pero lo que más destacó es que México es un país de muchos huevos. Es decir, que cada día se producen 120 millones de huevos, de tal manera que le tocaría uno a cada mexicano. Imagínense, apuntó el number one. Eso nos debe dar mayor valor aliento para echarle muchas ganas a lo que hacemos.
Y vaya que hará falta tener presente este producto en los tiempos que vienen y producir 240 millones de huevos diarios.
2.- El resbalón de Mancera.
Por no ler (sic) bien lo que le dan a firmar, Miguel Ángel Mancera tuvo tremendo resbalón del que todavía se sigue sobando y por poco le echan a perder su intención de asistir a los XV años de Rubí.
Los focos de alerta se encendieron cuando se supo que en la nueva Constitución de la CDMX se incorporaría el requerimiento del cobro de una contribución para obras de mitigación, lo cual ya existe en la ley orgánica y que se cobra a desarrolladores y constructores.
“Se trata de una contribución de mejora que se ha cobrado desde hace mucho tiempo”, aclaró.
El problema es que en la redacción sobre las plusvalías inmobiliarias se interpretaba que afectaría directamente al propietario del inmueble lo que detonó el escándalo.
A Mancera se le fue el color del rostro cuando se enteró que ese párrafo soltó a los demonios y se puso el traje de bombero.
La confusión se atribuyó a la redacción del artículo 21, apartado C, numeral 7 de la nueva Constitución capitalina que decía así: “Los incrementos en el valor del suelo derivados del proceso de urbanización se considerarán parte de la riqueza pública de la ciudad. La Ley regulará su aprovechamiento para restaurar los ecosistemas y las zonas degradadas de la ciudad.”
La misma referencia aparece en el artículo 94 de la Ley de Vivienda aprobada en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal
Mancera ordenó retirar de la propuesta constitucional el párrafo referido el cual fue eliminado por unanimidad, mientras que en la Asamblea Legislativa también hubo tal revuelo que Leonel Luna Estrada, presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF anunció que se modificaría el Artículo 94 de la Ley de Vivienda para no echarle más leña al tema.
Pero si Mancera y Luna corrigieron, es porque algo estaba mal, ¿qué no?
3.- Ejército pide certeza legal y los legisladores se hacen guajes.
Estamos por cumplir dos quinquenios metidos en el círculo vicioso de un debate que no llega a ningún lado.
Por una parte está el número de muertos atribuidos al crimen organizado que suman más bajas que en las guerras de Irak y Afganistán, dicen los que saben; y por otro la incapacidad de las policías para combatir la inseguridad y, el papel del Ejército en las calles.
Ayer el secretario de la Defensa, Salvador Cienfuegos tocó el punto más sensible e insistió en que el Senado debería concentrar sus esfuerzos para crear un marco jurídico que defina el papel de las fuerzas armadas y sus tareas en materia de seguridad interior.
“Necesitamos que nos diga qué hacemos porque estamos en la incertidumbre”, añadió Cienfuegos.
El Ejército desempeña funciones que deberían realizar las policías creadas ex profeso y a las que se les paga por eso. Los gobernadores y alcaldes no han cumplido con su tarea de crear policías bien preparadas y honestas.
El Ejército tiene muchas desventajas cuando realiza funciones de seguridad, explicó Cienfuegos. Una es la justicia de “puerta giratoria” que consiste en que los militares detienen y entregan a la justicia a los delincuentes, pero estos salen libres sólo con quejarse de que se incumplió con el debido proceso.
Aparte, los militares ya lo piensan dos veces antes de acudir a los operativos donde el tema de los derechos humanos los pone en desventaja sobre los agresores y delincuentes.
Y si, Cienfuegos admitió que los soldados dejarían las calles y regresarían a los cuarteles, siempre y cuando exista certeza jurídica de las tareas que deben cumplir.
Pero terminamos en el mismo punto. Todo mundo coincide en que el marco jurídico para la seguridad interior es una asignatura pendiente y urgente. Y qué esperan los congresistas.
Pero los senadores y diputados están por bajar la cortina el 15 de diciembre para irse volando a los XV de Rubí. Lo demás, puede esperar.
4.- Nuño avala acuerdos de Alejandro Murat Hinojosa con el magisterio.
Y por eso dio el visto bueno a la propuesta que hizo el gobernador de Oaxaca, para regularizar a 3 mil 700 docentes que están dando clases sin cobrar. Nuño aseguró que el tema lo revisó y le pareció bien, o sea que no hay gato encerrado.
El tema de por si es complicado por los años de conflicto magisterial que hicieron prácticamente ingobernable a la entidad.
Hoy el panorama pinta distinto.
