El diluvio: Algo más sobre Ayotzinapa-Iguala


Rafael Cardona

Yo iniciaría cualquier comentario relacionado con este tema, con una idea: el conflicto sobrepasó hace mucho tiempo al Gobierno mexicano.

Lo sobrepasó por razones ya dichas por el propio Presidente de la República, en una entrevista reciente.

Dijo de la demora en la respuesta de la parte superior del Gobierno, frente a los desmanes de las partes intermedias y bajas del Gobierno. 
Quiero decir con esto, el gobierno local del estado de Guerrero y el gobierno municipal o los gobiernos municipales de Cocula y de Iguala y quizás hasta de Tixtla, si nos vamos hasta allá.

–¿Cómo se confirma que el Gobierno fue sobre pasado, fue rebasado?

Pues se confirma con dos cosas, la primera cuando corrieron a Murillo.

Murillo Karam, con los elementos técnicos disponibles por  la Procuraduría, ofreció la verdad oficial, quizás cometió el error de llamarle verdad histórica, cuando que la verdad no debería de tener ningún adjetivo, la verdad debería de ser simplemente eso.

Pero ¿cuándo se confirmó que el estado quedó detrás de los hechos? Bueno pues cuando se amplió la estancia de los expertos de la OEA.

Estos señores se llaman expertos independientes, pero dependen, de quien los mandó llamar, de quien los organizó, de quien les dijo:

–Vengan aquí, para que después vayan a México y hagan ustedes, con la garantía de independencia, de autonomía, de certeza, de imparcialidad, e neutralidad, lo que las autoridades mexicanas hicieron mal. 

Desde ahí ya hay un juicio en contra del Gobierno de este país.

Este señalamiento, algunos ya desde la semana pasada se lo adjudicaban como obra propia y políticamente interesada, a Emilio Álvarez Icaza, secretario de la CIDH en Washington.

cardona  emilio alvarez

Emilio Álvarez Icaza es un personaje importante en la evolución en México, del concepto mismo de los derechos humanos, el cual se remonta a la vigencia de una institución muy cercana a la Iglesia Católica, donde  se formó Emilio Álvarez Icaza, porque su padre don Pepe Álvarez, era el director del Centro Nacional de Comunicación Social, que en aquel tiempo, (estoy hablando del México de los años 70), se decía que estaba manejado directamente por el entonces obispo de Cuernavaca, don Sergio Méndez Arceo y toda esta corriente de la teología liberadora que tanto dio de que hablar en los años subsecuentes y  de la cual ahora todavía quedan en México algunos representantes, como por ejemplo el obispo de Saltillo, Raúl Vera López.

Todos recordamos que a Raúl Vera López,  El Vaticano lo mandó de coadjutor  a San Cristóbal de las Casas, para aplacar un poco a don Samuel Ruiz y resultó que don Samuel Ruiz era medido junto a como resultó el entusiasmo revolucionario del obispo Vera.

Entonces, años después,  Emilio Álvarez Icaza contendió por la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, perdió, creo que no juntó más allá de ocho o nueve votos, mientras que quien  le ganó juntó como 80.

Y bueno, se fue a trabajar a la Comisión Interamericana y desde ahí se convirtió a querer o no querer, en un censor de la política mexicana de los derechos humanos, porque el camino es sumamente simple.

Cuando las cosas no se resuelven en México a satisfacción del quejoso, el quejoso va corriendo a la Comisión Interamericana y la Comisión Interamericana siempre le va a dar la razón, se llame Jorge Castañeda o se llame Rosendo Radilla o se llame Ayotzinapa, también.

Ellos siempre estarán para señalar con un rigor absolutamente inflexible, cualquier circunstancia que sea o parezca una violación de derechos humanos.

Hace pocos días, el sábado apareció ya por la noche una entrevista muy extensa de Emilio Álvarez Icaza, preparando su viaje a México en la revista fundada por el hombre que le daba voz (en aquel Excélsior) a la organización no gubernamental que manejaba su papá, que es la actual revista “Proceso”.

cardona raul plascencia villanueva

Entonces ahí Emilio Álvarez Icaza despliega todo y dice que en México hay un enorme retroceso y una desventajosa condición en la política de derechos humanos.

Y aquí nos encontramos con que ya aparece una organización en México muy interesante, que se llama “Alto al Secuestro” y “Alto al Secuestro” está, (todos lo sabemos) organizada por la señora Isabel Miranda y la señora dice que la intervención de Emilio Álvarez Icaza tiene un conflicto de interés porque EAI tiene nexos desde hace mucho tiempo, con las organizaciones que aquí defienden a los padres y a las víctimas de todo este grupo de personas de Ayotzinapa.

Y no podemos olvidar otro elemento, la señora Isabel Miranda fue quien presentó la candidatura del desaparecido, para fines del cargo nada más, desaparecido ombudsman Raúl Plascencia; ella fue quien acudió al Senado a presentar la candidatura y ella fue un poco como la madrina del hombre que venció en la lucha por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos al señor Emilio Álvarez Icaza.

Así se entiende mejor cómo esta organización pide (y quizá tenga razón) la salida del grupo de “expertos” de la OEA. En México, dice la ley, los delitos los investiga la Procuraduría General de la República y de las violaciones de Derechos Humanos s encarga la Comisión Nacional de esa materia.

Simple, Watson, simple.