- Masacre contra mexicanos en el Paso Texas la peor tragedia vivida.
- Donald Trump el ferviente promotor del racismo hitleriano en USA.
- Previo al atentado circuló vía internet “invasión hispana de Texas”.
Alberto Vieyra Gómez
Trece horas de crímenes racistas y terroristas fueron los que se vivieron el pasado fin de semana en el sur de Estados Unidos, particularmente la masacre contra mexicanos y latinos en El Paso, Texas con saldo de 7 muertos y más de 10 heridos, la mayoría de Chihuahua. Ya suman 251 tiroteos que se reportaron en Estados Unidos en los 215 días que han transcurrido del 2019, la mayoría de ellos con tintes racistas.
¿Qué nos dicen estos crímenes de odio? Pues nada, que en Norteamérica hay un desequilibrado mental, llamado Donald Trump que cobra como presidente de los Yunaites solamente para dividir a los norteamericanos y fomentar la infame y ancestral cultura racista contra todo lo que no sea raza blanca, llamada por el cura andariego Dominique Strauss, allá por 1855 como “la basura blanca”.
Donald Trump es el culpable del racismo hitleriano que impera en los Estados Unidos, en donde a las masacres suelen llamarles “terrorismo doméstico”. Todo indica que el tiroteo en Walmart de El Paso, Texas fue un acto político calculado, extraído de la retórica nacionalista blanca que impera en la política moderna del país. Hora y media antes del tiroteo en el Walmart circuló en internet un manifiesto contra la “invasión hispana de Texas”, detallando un plan para dividir EU en territorios por raza. “Si podemos deshacernos de suficientes, entonces nuestra forma de vida puede ser más sustentable”, rezaba el texto bajo el título La verdad incómoda, de autor desconocido.
¿Por qué ni allá ni acá actuó alguna autoridad para evitar el acto terrorista y racista de El Paso? …
Para los racistas blancos, la invasión latina a los territorios que pertenecieron a México hasta 1848, son una justificación para evitar no sólo la silenciosa reconquista del territorio, sino la cultura del exterminio que comenzó hace casi dos siglos con la llegada de los llamados Rangersingleses, afincados principalmente en Texas.
Recordaré que el odioso racismo es sembrado en Europa por Adolfo Hitler y provocaría la muerte de casi 59 millones de personas en la Segunda Guerra Mundial, un auténtico genocidio, entre ellos 7 millones y medio de judíos que representaban un monumental peligro para la religión católica y el capitalismo.
Adolfo Hitler sembraría la semilla del nacionalismo extremista propalando a los cuatro vientos la tesis de que la raza blanca o raza aria era la más pura e inteligente de la tierra y debía gobernar por los próximos mil años.
El nacionalismo racista hitleriano es el mismo que hoy enarbola en Estados Unidos la llamada bestia trumpiana, apodado también el Hitler gringo, quien durante la primera campaña electoral rumbo a la presidencia de Estados Unidos declaro que Norteamérica tenía que volver a ser una nación de blancos. ¡Imposible!, porque la nación más poderosa del planeta se configuró en los últimos dos siglos con migrantes de todas las latitudes del mundo, muchos de ellos negros procedentes de Europa y áfrica, a los que hoy, Donald Trump y sus racistas seguidores blancos les piden a coro: ¡que se vallan, que se vallan, de Estados Unidos! ¡Qué perversa división de un gobierno del diablo!, empeñado en dividir a su pueblo para perpetuarse en el poder, otros 4 años.
NEUROSIS DE LA BESTIA
La neurosis no es locura, pero quienes la padecen, están a un paso de ella. La neurosis es la enfermedad de las mil caras. Es una enfermedad del alma, que no la curan los médicos sino solamente el altísimo dios todopoderoso, Jehová.
Depresiones agudas, miedo, ansiedad, angustia, celos, gastritis, dolores psicosomáticos, gripas neuróticas, misofobia y muchísimos padecimientos más son los que conforman la neurosis que mágicamente se pueden curar mediante una militancia periódica en grupos de autoayuda.
La misofobia (bacilofobia o bacteriofobia) es una de esas horrendas caras de la neurosis que padece Donald Trump, la bestia trumpiana quien no es amante de saludar a la gente de mano y cuando lo llega a hacer, inmediatamente busca la primera oportunidad para lavarse y desinfectarse con alcohol y otras sustancias antisépticas las manos hasta los codos; Esto me recuerda aquél memorable pasaje bíblico en el que los diabólicos fariseos invitaron a Jesucristo a comer, a la casa de uno de ellos.
Tenían la costumbre de lavarse las manos hasta los codos y cuando Jesucristo se lavó exclusivamente sus manos, sorprendidos los fariseos le echaron en cara que las manos se lavan hasta los codos. Aunque lavarse así las manos no viola la Ley de Dios, tampoco es obligatorio.
FARISEO GRINGO
Ante semejante necedad, Jesús les daría la siguiente lección: “Mira, ustedes, los fariseos, limpian por fuera la copa y el plato (refiriéndose a su costumbre de lavarse las manos hasta los codos) pero por dentro están llenos de codicia y maldad ¡Insensatos! Sí, Donald Trump en todo es caso el fariseo gringo.
Y quizá ello explique parte de su acendrado racismo y odio que siente contra las personas que no son de color blanco, pues él, como Adolfo Hitler piensan erróneamente que “la raza aria o blanca es la raza más pura de este planeta” ¡Falso de toda falsedad!, hay otras razas mucho más puras que la raza blanca, pero por respeto no entrare en detalle.
Quienes padecen el Toc´ misofobia piensan que cualquier cosa que toquen los podría infectar de un virus, gérmenes, hongos o bacterias letales lo que hace que su mente permanentemente libre una guerra de miedos que en la mayoría de los casos hace que la mente de esas personas se descargue y vivan en una permanente depresión.
REELECCIÓN DE TRUMP; ARGUMENTOS PUERILES
De acuerdo con diversos medios de comunicación y periodistas que han estudiado detenidamente su actuar público y privado de Donald Trump, han sugerido que el güero pelos de elote no es una persona apta para gobernar a la nación más poderosa de la tierra y para colmo, ese individuo enfermo de una aguda neurosis esta por repetida ocasión en campaña electoral para reelegirse en el 2020 y para ello utiliza como estrategia fundamental el racismo, la xenofobia y el divisionismo entre los norteamericanos, sabedor de aquél viejo principio de “divide y vencerás”.
EL PRESIDENTE DE EU CONTRA 4 LEGISLADORAS
Recientemente, durante un mitin en Greenville, Carolina del Norte, Donald Trump agitó al avispero del racismo arremetiendo contra 4 congresistas demócratas que son de raza negra o de origen latino. ¡Regrésalas, regrésalas!, coreaba la muchedumbre que pedían regresarlas a sus naciones ante el regocijo del güero loco.
Quién no recuerda cuando en su primera campaña electoral, el llamadoHitler gringo ofendió a los mexicanos tildándonos como: La basura del mundo y con base en ultrajes a la dignidad humana. Donald Trump con todo y su monumental neurosis no sólo ha dividido a los norteamericanos, si no que se ha convertido en el enemigo público número uno de la migración musulmana y latina.
Bueno, pues ese detestable ser enfermo de neurosis crónica es quien seguramente gobernara a los yunaites hasta el 2024, a menos de que los demócratas dejen de estar como perros y gatos y postulen a un candidato que garantice la reconciliación y unidad de todo el pueblo norteamericano.