Ojo con los Benítez Tiburcio
Martínez Neri y Estefan, la dupla de Cué
El saqueo, encubierto desde el gobierno
Tomás Ezequiel Toledo
El par de hermanos Benítez Tiburcio, Mariana y Alberto, han comenzado a despuntar en la política nacional, pero no con las mejores notas.
Mariana, la ex subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la República, ya es diputada federal por Oaxaca, y la semana pasada fue la única -además del coordinador, César Camacho Quiroz- que ofreció una conferencia de prensa después de su registro ante los órganos administrativos de la Cámara.
Trasluce su interés por una remota posibilidad de crecer hasta colocarse como una de las cartas de las que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) dispondrá para resolver la candidatura al gobierno del estado en 2016. Vaya, como si no hubiera ya suficientes.
Es de recordar que en febrero renunció a la subprocuraduría y que, en su lugar, el Presidente nombró a Arely Gómez, quien después escaló a la titularidad de la PGR, cuando Jesús Murillo Karam fue arrinconado a la Secretaría de Desarrollo Agrario, de la que el jueves fue relevado sin ninguna mención específica.
Así que esa subprocuraduría tiene una especial relevancia y el hecho de pasar a las ligas políticas tiene para Benítez Tiburcio un objeto específico.
Por eso es que fue notorio el gasto que ella y su familia realizaron para la vela istmeña del 26 de mayo en la que el grupo musical contratado fue el de Los Ángeles Azules, que cobra 1.5 millones de pesos por presentación.
La ahora diputada federal argumentó que fue una cooperación familiar, pero en los círculos públicos del estado se sabe que quien financió la celebración para beneficiar la imagen de la ex funcionaria fue su hermano Alberto.
Y es que Alberto Benítez Tiburcio, se ha caracterizado en los cinco años de gobierno de Gabino Cué, según se sabe, por ser uno de los nuevos ricos del estado, desde su cargo como subsecretario de Planeación, Programación y Presupuesto de la Secretaría de Finanzas.
Claro, tenía un excelente maestro: Gerardo Cajiga, que como es harto conocido, se trata de un personaje de esos que no piden que les den sino que los pongan donde hay. Y en el gasto de Oaxaca hay mucho. Publicaciones del estado le atribuyen la compra de varias hectáreas en Jalapa del Marquez y además es el encargado de «bajar» los recursos destinados a las obras para los municipios.
Así que no le costaba mucho destinar unos varios millones de pesos para la vela promocional de su hermana y ahora que ella salta a las grandes ligas legislativas será, sí, más visible, pero también será evidente el manejo que Mariana y Alberto Benítez Tiburcio, le den al presupuesto público para utilizarlo en su mutua ambición.
Otro parcito que llega a la Cámara de Diputados, de la mano de Gabino Cué, es el de Francisco Martínez Neri y José Antonio Estefan Garfias.
Como ya se sabe, una alianza entre corrientes del PRD llevó a Martínez Neri a la coordinación de los diputados federales de ese partido, en una decisión que desplazó a uno de los fundadores de “Los Chuchos”, Jesús Zambrano, a quien como premio de consolación se le ofreció presidir la Mesa Directiva de la Cámara por un año, a partir de este martes.
Aun cuando su propuesta inicial fue Estefan Garfias, su pasado por el gobierno de terror de Ulises Ruiz y el hecho de que «ganó» la diputación federal por un margen mínimo no le daba para incluirlo en la disputa entre las tribus perredistas.
Así que se decidió por el ex rector de la UABJO. Y a Estefan Garfias lo quiere en la Comisión de Presupuesto, desde donde podría mangonear la entrega de recursos extraordinarios para su administración en 2016. Desde ahora Gabino ya prepara su Año de Hidalgo.
La intervención de Cué en el proceso interno del PRD también tuvo la cooperación del jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, quien le sumó los cinco votos de sus diputados que forman parte de la denominada corriente Vanguardia Progresista.
Estefan fue impuesto por Gabino como candidato, a pesar de que las encuestas que él mismo aceptó como método para definir al representante del distrito federal 5, Tehuantepec, las ganó Félix Serrano. Luego, como ha ocurrido con todas sus promesas, Cué se desdijo y por poquito el ex priísta Estefan Garfias se queda fuera de la cámara.
Así que Gabino ya tiene quien le cubra las espaldas en su último año, ahora que cada vez se descubre cómo funcionarios de la administración estatal, alcaldes, colaboradores cercanísimos de Cué estaban en la nómina del desaparecido IEEPO.
En este semanario se ha informado, en años sucesivos, cómo la Auditoría Superior de la Federación (ASF) alertó a la administración estatal del desvío de recursos federales destinados a la educación en aviadores.
Y el «gobernador» se hizo la vista gorda, por decir lo menos. Igual que ha volteado la vista para otro lado mientras en el estado se cometen robos descarados al gasto público.
